sábado, 13 de junio de 2009


Los finales tienen sentimientos prolongados... si antes existan motivos que no quería ver ni escuchar, hoy compruebo que las palabras duelen mas que las sensaciones. Volví a chocar otra vez con la realidad, y esta vez me sangra el alma y mis cicatrices se marcan mas aun. Pero acepto esta culpa, herida y culpable, pero jamás humillada ni victima. Quizás de verdad le tenia miedo a los fracasos y yo nunca me di cuenta. Y no me hecho la culpa, solo asumo mi parte. Díganme como quieran, porque esta historia es mía y nadie la puede imaginar. Hoy podría ser mi mejor día para morir. Si, el mejor día para olvidar que volví a llorar y a maldecir en voz alta, pero no... no es el mejor momento de mi vida para terminar así. Y al final lo único que me queda son mis sueños, ahora todos pueden irse. Cuando esa persona se va, lo único que no se lleva son los sueños propios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario